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Francia

Francia

Francia (en francés: France; AFI: ), oficialmente República Francesa (en francés: République française; AFI: ), es un país soberano, miembro de la Unión Europea y con capital en París, que se extiende sobre una superficie total de 675 417 km² y cuenta con una población de 66 millones de habitantes.

Constituido en Estado social y democrático de derecho, su forma de gobierno está organizada como república semipresidencialista con el nombre oficial de «República Francesa» (République française) y la divisa « Liberté, égalité, fraternité » («Libertad, igualdad, fraternidad»).

El territorio de Francia, y su parte metropolitana, también llamada Francia continental, se ubica en Europa Occidental, donde limita, al sur, con el mar Mediterráneo, el enclave de Mónaco (4,4 km) e Italia (488 km); al suroeste, con España (623 km), Andorra (56,6 km) y el mar Cantábrico; al oeste, con el océano Atlántico; al norte, con el Canal de la Mancha, el mar del Norte y Bélgica (620 km), y al este, con Luxemburgo (73 km), Alemania (451 km) y Suiza (573 km).

Su territorio insular europeo comprende la isla de Córcega, en el Mediterráneo occidental, y diversos archipiélagos costeros en el océano Atlántico.

En América, es territorio de Francia la Guayana Francesa, que limita con Brasil (673 km) y Surinam (510 km), y las islas y archipiélagos de Martinica, Guadalupe, San Bartolomé, San Martín y San Pedro y Miquelón.

En el océano Índico posee las islas de Mayotte y de Reunión, así como los archipiélagos de la Polinesia Francesa, Wallis y Futuna y Nueva Caledonia en el océano Pacífico.

Son territorios deshabitados de Francia el atolón de Isla Clipperton, en el Pacífico oriental, y las denominadas Tierras Australes y Antárticas Francesas.

Francia es la quinta economía mundial con una elevada difusión cultural en el contexto internacional.

Miembro del G8, de la Zona Euro y del Espacio Schengen, y alberga a muchas de las más importantes multinacionales, líderes en diversos segmentos de la industria y del sector primario, además de que es el primer destino turístico mundial, con 80 millones de visitantes extranjeros al año.

Francia, donde se redactó la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789, es miembro fundador de la Organización de las Naciones Unidas y uno de los cinco miembros permanentes de su Consejo de Seguridad.

Francia alberga las sedes del Consejo de Europa y del Parlamento Europeo, ambas en Estrasburgo, y las de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico y de la Unesco, en París.

Es también una de las ocho potencias nucleares reconocidas y miembro de la OTAN.

Antigua potencia colonial, su cultura y civilización se encuentra difundida por países de todo el mundo unidos en la organización de la Francofonía.

El idioma francés es una de las lenguas con mayor difusión, tradicionalmente empleada como lengua de la diplomacia, que junto con otras idiomas regionales, conforma el patrimonio lingüístico de Francia, miembro de la Unión Latina.

Historia

Prehistoria y Antigüedad

Existen importantes restos del paleolítico inferior en el río Somme y los Pirineos tradicionales (hombre de Neandertal), así como en La Chapelle-aux-Saints, Le Moustier y La Ferrasie.

Del paleolítico superior hay abundantes vestigios de los hombres de Cro-Magnon, Grimaldi y Chancelade, datados en unos 25 000 años de antigüedad, los cuales están ubicados en el valle de Dordoña.

Entre las más famosas pinturas rupestres del mundo están las de Lascaux y de Font de Gaume, en los Pirineos franceses.

En el mesolítico algunas actividades agropecuarias fueron reemplazando en importancia a las cuevas, y en el neolítico (desde el III milenio a. C.) surgió la cultura megalítica (que empleó menhires, dólmenes y enterramientos).

Desde alrededor de 1500 a. C.

se inicia la edad del bronce, desarrollándose rutas comerciales.

Se ha encontrado utillaje de la industria achelense del homo erectus de hace 900 o 1000 años en la gruta Le Vallonnet, en el sur de Francia.

La edad del hierro y las culturas celtas se ubican dentro del I milenio a. C.

Las fronteras de la Francia moderna (1810) son aproximadamente iguales que las de la Antigua Galia, que fue habitada por los grupos celtas conocidos como galos, quienes fueron los habitantes de la región y casi toda Europa central desde la prehistoria.

Galia fue conquistada por Roma y su líder Julio César (que venció al jefe galo Vercingétorix ) en el siglo I a. C., y los galos adoptaron el idioma romano (el latín, del que evolucionó el francés junto a la presencia de dialectos celtas como el bretón).

El cristianismo enraizó en los siglos II y III, y se estableció firmemente durante los siglos V y VI, en aquella época Jerónimo de Estridón (San Jerónimo) escribió que Galia era la única región “libre de herejía”.

Reino de Francia (siglo III-843)

En el año 451, Atila, el líder de los hunos invadió la Galia con ayuda de los pueblos francos y visigodos, logrando establecerse en la parte principal de la Galia.

En el siglo IV, la frontera del este de Galia a lo largo del Rin fue cruzada por Pueblos germánicos, principalmente los francos, de la que deriva el antiguo nombre de “Francie”.

La “Francia moderna” debe su nombre al dominio feudal de los reyes capetos de Francia, alrededor de París.

Los francos fueron la primera tribu entre los conquistadores germánicos de Europa, después de la caída del imperio romano, en convertirse al Cristianismo a raíz del bautismo del rey Clodoveo en 498; así, Francia obtuvo el título de "Hija mayor de la iglesia”, y el país adoptaría esto como justificación para llamarse “el reino más cristiano de Francia”.

Sobre los territorios que componían la Francia de la Edad Media reinaron las siguientes dinastías:

La Dinastía Merovingia gobernó la actual Francia y parte de Alemania entre los siglos V y VIII.

El primer rey fue Clodoveo I quien conquistó gran parte del territorio Galo entre 486 y 507; y se convirtió al cristianismo ortodoxo (por oposición a la herejía arriana), siendo bautizado en Reims hacia el 496 obteniendo el apoyo de las élites galo-romanas y estableciendo un importante lazo histórico entre la corona francesa y la Iglesia Católica.

Reino de Francia (843-1791)

La existencia como entidad separada comenzó con el Tratado de Verdún (843), con la división del Imperio carolingio de Carlomagno en Francia Oriental, Francia Central y Francia Occidental.

Francia Occidental comprendía aproximadamente el área ocupada por la Francia moderna, de la que fue precursora.

Los Carolingios gobernaron Francia hasta 987, cuando Hugo Capeto fue coronado rey de Francia.

Sus descendientes, la Dinastía de los Capetos, la Casa de Valois, y la Casa de Borbón, extendieron y unificaron progresivamente el país con una serie de guerras y herencias dinásticas.

La monarquía absoluta se fue imponiendo paulatinamente a partir de la llegada al trono de la casa de Borbón, un proceso iniciado por Enrique IV y que alcanzó su apogeo bajo el reinado de Luis XIV en el siglo XVII y principios del XVIII.

A pesar de la oposición periódica de la alta nobleza y de las tensiones con los parlamentos provinciales, este régimen se mantuvo hasta el reinado de Luis XVI.

En este tiempo Francia poseía la población más grande de Europa y su política, su economía y su cultura influían en todo el continente.

Francia también obtuvo muchas posesiones de ultramar en América, África y Asia.

Repúblicas e Imperios

La secesión del Tercer Estado en los Estados Generales de 1789 y la creación de la Asamblea Constituyente marcaron el inicio de la Revolución francesa, cuyo hito simbólico fue la toma de la Bastilla.

Este proceso social, económico y político se desarrolló entre 1789 y 1799, y sus principales consecuencias fueron la abolición de la monarquía y la proclamación de la Primera República Francesa, eliminando las bases económicas y sociales del Antiguo Régimen en Francia.

Después de una serie de esquemas gubernamentales de breve duración, Napoleón Bonaparte tomó el control de la república en 1799, haciéndose primer cónsul y emperador del qué ahora se conoce como el Primer Imperio francés (1804-1814).

Aparte de sus proezas militares, a Napoleón también se le conoce por el establecimiento del Código Napoleónico, un código civil que permanecería vigente hasta la segunda mitad del siglo XX y serviría de modelo a otros países, como España.

Se le conoce también por su talento para hacerse rodear de brillantes expertos con un elevado sentido del Estado, que supieron crear el marco jurídico y administrativo de la Francia contemporánea.

Otros, sin embargo, lo consideran un dictador tiránico cuyas guerras causaron la muerte de millones de personas, y uno de los personajes más megalómanos y nefastos de todos los tiempos.

Después de llevar a la victoria los ejércitos de la Revolución en una guerra de defensa del territorio nacional amenazado por los ejércitos de las monarquías europeas, su ejército, la Grande Armée, conquistó la mayor parte de Europa continental.

En los territorios invadidos, Napoleón nombró a los miembros de la familia Bonaparte y a algunos de sus generales más cercanos como monarcas de los territorios.

Hoy en día, la familia real sueca desciende del general bonapartista Bernadotte.

Si bien la organización política de Francia osciló entre república, imperio y monarquía durante 75 años después de que la Primera República cayera tras el golpe de Estado de Napoleón Bonaparte, lo cierto es que la revolución marcó el final definitivo del absolutismo y dio a luz a un nuevo régimen donde la burguesía, y en algunas ocasiones las masas populares, se convirtieron en la fuerza política dominante en el país.

Tras la derrota final de Napoleón en 1815 en la batalla de Waterloo y como consecuencia del Congreso de Viena y la monarquía francesa de los Borbones fue reinstaurada, pero con nuevas limitaciones definidas por una Carta Magna.

En la revolución de julio de 1830, una sublevación civil derrocó al rey Carlos X y estableció la monarquía constitucional llamada "de julio", llevando al trono a Luis Felipe I, de la casa de Orleans.

Su reinado duró hasta que la revolución popular de 1848 estableciera la Segunda República Francesa.

Este régimen de breve duración terminó en diciembre de 1852, fecha en que Napoleón III dio un golpe de Estado y proclamó el Segundo Imperio francés.

Durante este nuevo imperio se produce un considerable desarrollo de los medios de transportes, así como una bonanza económica.

Se incrementa la red bancaria y se firma un tratado librecambista con Inglaterra en 1860 que fomenta el comercio internacional.

Sin embargo la política exterior tuvo una serie de fracasos importantes como la Segunda Intervención Francesa en México y sobre todo la estrepitosa derrota en la Guerra Franco-prusiana de 1870 en la cual Napoleón III fue vencido por completo.

Su caída precipitó la proclamación de la tercera república francesa, un régimen que se mantuvo hasta la Segunda Guerra Mundial.

Francia tuvo posesiones coloniales en varias partes del mundo, desde principios del siglo XVII hasta los años 1960.

En los siglos XIX y XX, su imperio colonial global era el segundo más grande del mundo después del Imperio británico.

En su pico, entre 1919 y 1939, el segundo Imperio colonial francés se extendió sobre 12 347 000 kilómetros cuadrados (4 767 000 millas cuadradas) de tierra.

Incluyendo Francia metropolitana, el área total de la tierra bajo la soberanía francesa alcanzó 12 898 000 kilómetros cuadrados (4 980 000 millas cuadradas) en los años veinte y los años treinta, que es 8,6 % del área de la tierra del mundo.

Francia en las Guerras Mundiales

Aunque en última instancia acabó como uno de los vencedores en la Primera Guerra Mundial, Francia sufrió unas pérdidas humanas y materiales enormes que la debilitaron en las décadas por venir.

Los años 30 fueron marcados por una variedad de reformas sociales introducidas por el gobierno del Frente Popular.

Francia y Reino Unido declararon la guerra a la Alemania nazi el 3 de septiembre de 1939 en virtud de un tratado suscrito con Polonia, cuyo territorio había sido invadido por la Wehrmacht, ejército alemán.

Al principio de la Segunda Guerra Mundial, Francia llevó a cabo una serie de campañas fracasadas de rescate en Noruega, Bélgica y los Países Bajos entre 1939 y 1940.

Después del ataque relámpago de la Alemania Nazi entre mayo y junio de 1940 y su aliado, la Italia fascista, la dirección política de Francia firmó el Armisticio del 22 de junio de 1940.

Los alemanes establecieron un régimen autoritario bajo la tutela del mariscal Philippe Pétain conocido como la Francia de Vichy, que adoptó una política de colaboración con la Alemania Nazi.

Los opositores del régimen formaron el estado de Francia Libre fuera de Francia, sostuvieron a la resistencia francesa y fueron sumando cada vez más territorios coloniales a su causa.

Francia continental fue liberada con el esfuerzo común de los aliados, Francia Libre, y de la resistencia francesa en 1945.

Francia después de la Liberación

La Cuarta República Francesa creada después de la Segunda Guerra Mundial luchó para mantener su estatus económico y político como potencia mundial.

Intentó recuperar el control sobre su imperio colonial, afectado por la guerra.

La tentativa poco entusiasta en 1946 de recuperar el control en Indochina Francesa dio lugar a la Primera Guerra de Indochina, que terminó en derrota francesa en la Batalla de Dien Bien Phu en 1954.

Solamente unos meses más adelante, Francia hizo frente a un nuevo conflicto, incluso más áspero que el anterior en su más vieja e importante colonia, Argelia.

El debate por mantener el control de Argelia, entonces hogar de un millón de colonos europeos, debilitó el país y condujo casi a la guerra civil.

En 1958, la cuarta república débil e inestable llevó a la Quinta República Francesa, que se apoya en un fuerte poder ejecutivo.

Charles de Gaulle tomó el camino extremo de la guerra.

La Guerra de Argelia y la guerra civil que estalló en Argelia entre los partidarios de abandonar la colonia y los colonos que se aferraban a mantener la presencia francesa, se concluyó en 1962, con la declaración de Evian que incluían la celebración de un referéndum de autodeterminación.

El general De Gaulle también tuvo que afrontar otra dura prueba en mayo de 1968, de la que salió triunfante en las elecciones anticipadas convocadas en junio del mismo año.

En 1981, el socialista François Mitterrand fue elegido presidente de Francia y gobernó desde 1981 hasta 1995.

Luego, el conservador Jacques Chirac sería elegido presidente de Francia, gobernando entre 1995 y 2007, año en su ministro de Interior, Nicolas Sarkozy, fue elegido presidente.

Francia apoyó a Estados Unidos en la primera Guerra del Golfo (1990), así como en el derrocamiento del régimen talibán.

En décadas recientes, la reconciliación y la cooperación de Francia con Alemania han probado la línea central a la integración política y económica de la Unión Europea de desarrollo, incluyendo la introducción del euro en enero de 1999.

Francia ha estado en la vanguardia de los Estados miembros europeos de la unión que intentaban explotar el ímpetu de la unión monetaria para crear una unión europea política, con una defensa y un aparato unificados y más capaces en la seguridad.

Dominique de Villepin, a la cabeza de la diplomacia francesa, lideró el bloque de países que se opuso a la invasión de Iraq de 2003, amenazando con utilizar su derecho al veto en el Consejo de Seguridad, llevando de paso a un enfriamiento de las relaciones con la administración de George W.

Bush.

El candidato de la derecha conservadora, Nicolas Sarkozy, derrotó a Segolene Royal en los comicios electorales del 6 de mayo de 2007 para ocupar la Presidencia de la República Francesa, sucediendo a Jacques Chirac.

El 6 de mayo de 2012 Sarkozy fue derrotado en su aspiración a continuar al frente del gobierno en las elecciones presidenciales por el candidato socialista François Hollande.

En 2015, unos atentados terroristas perpetrados en París por una célula islamista (17 muertos, entre los días 7 y 9 enero) provocaron una gran conmoción y una movilizaciones republicanas

Gobierno y política

La actual Constitución de Francia (Constitución de la quinta república) fue aprobada por referéndum el 28 de septiembre de 1958.

Desde su implantación, los sucesivos Presidentes de la República han fortalecido notablemente su autoridad sobre el poder ejecutivo, en un principio encarnado en el Primer Ministro y el Gobierno, y se han constituido en verdaderos representantes del Ejecutivo en relación con el parlamento.

Según la Constitución, el presidente es elegido por sufragio directo por un período de 5 años (originalmente eran 7 años).

El arbitraje del presidente asegura el funcionamiento regular y el equilibrio de los poderes públicos.

El presidente designa al primer ministro, quien preside sobre el Gabinete, comanda a las fuerzas armadas y concluye tratados.

El Gabinete o Consejo de Ministros es nombrado por el Presidente a propuesta del Primer Ministro.

Esta organización del gobierno se conoce como república semipresidencialista.

La Asamblea Nacional es el principal cuerpo legislativo.

Sus 577 diputados son electos directamente por un término de 5 años y todos los asientos son votados en cada elección.

La otra cámara es el Senado, cuyos 321 senadores son elegidos por un colegio electoral (es un sufragio indirecto) y permanecen 9 años en sus cargos.

Un tercio del senado es renovado cada 3 años.

Los poderes legislativos del senado son limitados, y la asamblea nacional es quien posee la palabra final en caso de ocurrir una disputa entre ambas cámaras.

El gobierno posee una fuerte influencia sobre la agenda parlamentaria.

Además existe un Consejo Constitucional (9 miembros), que asegura el control de la constitucionalidad de las leyes y resuelve los contenciosos electorales.

Son ciudadanos franceses todos los mayores de 18 años.

Relaciones exteriores

Unión Europea

La Declaración Schuman es el título con el que informalmente se conoce al discurso pronunciado por el Ministro de Asuntos Exteriores francés Robert Schuman el 9 de mayo de 1950 en el que —tal como lo reconoce oficialmente la Unión Europea (UE)— se dio el primer paso para la formación de esta organización al proponer que el carbón y el acero de Alemania y Francia (y los demás países que se adhirieran) se sometieran a una administración conjunta.

El Tratado de París, firmado el 18 de abril de 1951 entre Bélgica, Francia, la República Federal Alemana, Italia, Luxemburgo y los Países Bajos, estableció la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (CECA) que posteriormente formó parte, primero, de las Comunidades Europeas y, luego, de la Unión Europea.

Los franceses cuentan con la segunda representación más numerosa en el Parlamento Europeo, en virtud de su número de habitantes; además, el francés Jean-Claude Trichet es el Presidente del Banco Central Europeo y Jacques Barrot fue uno de los vicepresidentes de la Comisión Europea para el período 2004 - 2009.

Estrasburgo es la sede del Parlamento Europeo; las sesiones plenarias se realizan allí una semana cada mes.

Por ello la ciudad es considerada como la segunda capital de la UE después de Bruselas, donde están los diputados el resto del tiempo.

La ciudad también es sede del Comando Central del Eurocuerpo y el Centro de información de Europol.

El 14 de julio de 2007 tropas de los 27 países de la Unión Europea desfilaron juntas por primera vez en los Campos Elíseos de París con motivo de la fiesta nacional francesa en una ceremonia encabezada por Sarkozy.

La presidencia francesa del Consejo de la Unión Europea en el segundo semestre de 2008 estuvo enmarcada dentro del sistema de administración rotativa de dicha institución.

Estaba previsto que al término de la administración entrase en vigor el Tratado europeo de Lisboa, permitiendo nombrar al Primer Presidente permanente de la Unión, pero ello no fue posible ya que el documento no fue ratificado por todos los estados.

Fuerzas armadas

Las Fuerzas armadas francesas son miembros de la OTAN, EUFOR y del Eurocuerpo.

El ejército francés, con una fuerza de personal de 547 278 en 2014 (257 920 de fuerza regular, 204 000 reservistas y cerca de cien mil de gendarmería), constituye una de las fuerzas militares más grandes de Europa.

En 2011 el país tuvo el quinto gasto militar mundial más alto, detrás de los Estados Unidos, China, Rusia y el Reino Unido.

La dinámica industria armamentística gala, especialmente la aeronáutica, produce aviones de caza como el Rafale, con capacidad nuclear.

El DGSE es el servicio de inteligencia del país.

La Armada Francesa cuenta con un solo portaaviones, el de impulsión nuclear Charles de Gaulle pero esperan tener disponible en el 2012 uno con el nombre PA2 (Portaaviones 2) que desplazará 75 000 toneladas.

En el año 2011, Francia destinó el 2,3 % de su PIB anual a la defensa nacional, según los datos de la OTAN y junto con Alemania destinan en conjunto más del 40 % del gasto en defensa total de la Unión Europea.

Alrededor del 10 % del presupuesto en defensa francés se destina a la Force de frappe, encargada de las armas nucleares embarcadas en submarinos.

En marzo de 2008 el Gobierno francés anunció sus planes para lograr la reducción de su arsenal a menos de 300 cabezas nucleares, "la mitad del máximo" de las que mantuvo durante la Guerra Fría.

Derechos humanos

En materia de derechos humanos, respecto a la pertenencia en los siete organismos de la Carta Internacional de Derechos Humanos, que incluyen al Comité de Derechos Humanos (HRC), Francia ha firmado o ratificado:

Organización territorial

Francia se divide administrativamente en regiones, departamentos, distritos, cantones, y municipios (o comunas).

Adicionalmente cuenta con colectividades, territorios y dependencias.

El departamento más extenso es la Guayana Francesa con 91 000 km².

Las 27 regiones y sus correspondientes 101 departamentos son de la metrópoli o de ultramar.

División territorial metropolitana

División territorial de ultramar

Seis dependencias son islas francesas dispersas y actualmente deshabitadas: Clipperton, en el nororiente del océano Pacífico (administrada desde la Polinesia Francesa); y Europa, Gloriosa, Juan de Nova, Tromelin, y Bassas da India, en el suroccidente del océano Índico (administradas desde el departamento de la Reunión).

Geografía

Geografía física

El territorio francés tiene una extensión de 675 417 km², lo que representa el 0,50 % de las tierras emergidas del planeta (Puesto 40º en el mundo).

La Francia metropolitana, es decir, europea, cuenta con 551 695 km² (dato del Instituto Geográfico Nacional francés), en tanto que la Francia de ultramar tiene otros 123 722 km² (sin considerar la Tierra Adelia por el Tratado Antártico en 1959 que suspendió el reconocimiento de todas las soberanías en dicha región).

Sus islas de mayor tamaño son Nueva Caledonia, Córcega, Guadalupe y Martinica.

La demarcación política de la Francia continental europea se apoya en sus «fronteras naturales» siendo estas (en sentido antihorario): el mar del Norte, el canal de la Mancha, el océano Atlántico (golfo de Vizcaya); los Pirineos (frontera con España y Andorra); el mar Mediterráneo (golfo de León, Costa Azul); los Alpes; los montes Jura; el río Rin.

El Rin es frontera solo en una parte de su curso, punto desde el cual y hasta el Mar del Norte, no existen accidentes geográficos que delimiten «naturalmente» la frontera con Bélgica, Luxemburgo y Alemania.

La isla francesa más importante en Europa es Córcega, ubicada en el mar Mediterráneo.

En la Francia metropolitana las fronteras se extienden a lo largo de 2889 km y la línea costera por otros 3427 km.

En África, Asia, Oceanía, América del Norte y el Caribe, el territorio francés es insular.

La Guayana Francesa es el único territorio continental fuera de Europa, limita al norte con el océano Atlántico (378 km); al oeste con Surinam (510 km), al este con Brasil (673 km).

La Isla de San Martín tiene una frontera meridional con las Antillas Holandesas (10,2 km).

Francia posee parte de los Pirineos y los Alpes, ambos al sur.

Otros macizos montañosos son el Jura (en la frontera con Suiza), las Ardenas, el Macizo Central y la cordillera de los Vosgos.

El Mont Blanc en los Alpes con 4 810,06 metros de altura es la cumbre más alta de Europa occidental.

El punto más bajo del país está en el delta del río Ródano: –2 m.

El territorio cuenta también con llanuras costeras hacia el norte y oeste del país.

Biodiversidad y usos del suelo

La mayor parte del territorio metropolitano de Francia corresponde al bioma de bosque templado de frondosas, aunque también están presentes el bosque templado de coníferas en los Alpes y el bosque mediterráneo en el sureste.

La cantidad de venados y ciervos en estado salvaje se está incrementando gracias a políticas orientadas con este objetivo, además se garantiza la protección de las especies autóctonas no domésticas, con la creación de parques y reservas naturales, así como por la reintroducción de especies que fueron exterminadas en el país (oso pardo, lince y bisonte europeo, entre otros).

En la Francia metropolitana hay 136 especies de árboles, algo excepcional tratándose de un país europeo.

Las especies vegetales cultivadas para consumo humano directo y para la producción agro-industrial ocupan grandes espacios de la superficie francesa, destacándose la vid y el trigo entre muchas otras.

Se practica una intensiva crianza y explotación de reses, cerdos, ovejas, cabras y caballos.

También abundan especies menores como conejos y aves de corral.

La producción agropecuaria representa un 56 % (del cual las tierras de labrantío son un 33 %, las cosechas permanentes un 3 %, y los pastos permanentes un 20 %), la masa forestal el 28 %, y «otros» el 16 %.

Los bosques se extienden sobre la superficie de la Francia metropolitana hasta cubrir más de 140 000 km.

Las zonas especialmente protegidas conforman el 8 % del territorio nacional.

El subsuelo proporciona materiales de construcción en abundancia (grava, arena, cal) y materias primas (caolín, talco, azufre, potasa), pero es pobre en productos energéticos y minerales.

La Guayana Francesa por su parte, forma parte del Macizo Guayano-venezolano, teniendo el 90 % de su territorio cubierto por la selva tropical.

Hidrología y costas

Las aguas interiores cubren el 0,26 % de la superficie continental francesa.

Los ríos más importantes de Francia son, en la vertiente atlántica: Loira, Garona, Dordoña (en el océano Atlántico), y Sena (en el canal de la Mancha).

En la vertiente mediterránea el Ródano (en el golfo de León), con su afluente el Saona.

También posee una buena parte de las cuencas de los ríos Rin, Mosa, Mosela y Escalda (que desembocan en el mar del Norte).

El río interior más extenso es el Loira, con más de 1000 km.

El lago más extenso es el Lemán (582 km²).

Francia tiene 5500 km de costas y ocupa el cuarto lugar en producción pesquera en la UE.

En total las costas francesas son bañadas por los océanos Atlántico, Índico, y Pacífico.

La Zona Marítima de Francia es de 12 millas contadas desde la costa, y la Zona Económica Exclusiva se extiende hasta las 200 millas desde la costa (11 millones de km²).

Acantilados cerca de Étretat, Normandía.

Campo de lavanda en la Provenza.

Cereales en Beauce.

Clima alpino en los Alpes franceses.

Garganta del Verdon en la Provenza.

Clima de montaña en el Parque nacional de Mercantour.

Clima tropical en Bora Bora (Polinesia Francesa).

Pointe du Van, Bretaña.

Clima oceánico y playas arenosas en la bahía de Arcachón.

Clima semi árido en la isla de Córcega.

Economía

Francia es considerado un país de primer mundo por su nivel de vida (IDH).

Es la quinta economía mundial en términos nominales, y a nivel europeo se coloca por detrás de Alemania, con un PIB en dólares superior al del Reino Unido.

En 2006 el crecimiento económico francés llegó al 2 % siendo el más bajo de la zona euro y sus índices de desempleo entre los más altos.

La economía francesa cuenta con una gran base de empresas privadas, pero la intervención estatal en las grandes compañías es superior a la de otras economías de su tamaño.

Sectores clave con grandes inversiones en infraestructura como el eléctrico, las telecomunicaciones o el sector aeronáutico, históricamente han sido dirigidos directamente o indirectamente por el Estado, aunque desde principios de la década de 1990 la participación estatal ha ido decayendo.

Sus bazas son diversas: transporte, telecomunicaciones, industrias agro-alimentarias, productos farmacéuticos, aeronáutica, defensa, tecnología, así como el sector bancario, los seguros, el turismo, y los tradicionales productos de lujo (marroquinería, prêt-à-porter, perfumes, alcoholes, etc.).

El PIB por sector: La agricultura (2,7 %), industria (24,4 %), servicios (72,9 %).

Por otro lado, la energía solar está comenzando a tener cada vez mayor importancia en Francia.

Tiene una industria aeroespacial importante conducida por el consorcio europeo Airbus además de tener una base espacial llamado puerto espacial de Kourou.

En telecomunicaciones destaca France Télécom como el principal operador del país.

Sin la producción petrolífera, Francia ha confiado en el desarrollo de la energía nuclear, que ahora representa aproximadamente el 78 % de la producción de electricidad del país.

Los residuos radiactivos son almacenados en instalaciones de retratamiento.

En 2006 la producción neta de electricidad ascendió a 548,8 TWH, de los cuales:

  1. 428,7 TWh (78,1 %) fueron producidos por la generación de reactores nucleares.
  2. 60,9 TWh (11,1 %) fueron producidos por la generación de las centrales hidroeléctricas.
  3. 52,4 TWh (9,5 %) fueron producidos por la generación de las centrales termoeléctricas.
  4. 6,9 TWh (1,3 %) fueron producidos por la generación de otros tipos como los autogeneradores.

Mercado laboral

EL PIB per cápita francés es ligeramente inferior al de otras grandes economías europeas comparables, como la alemana o la británica, aunque el PIB por hora trabajada es uno de los más altos de la OCDE.

El PIB per cápita se determina por (I) la productividad por hora trabajada, que en Francia es la más alta de los países miembros del G8, (II) el número de horas trabajadas, que es uno de los más bajos de las economías desarrolladas; (III) la tasa de actividad.

Francia tiene una de las tasas de actividad más bajas para el segmento de población entre 15 y 64 años de la OCDE: En 2004 solo el 68,8 % de esta franja de población estaba empleada, frente a tasas del 80 % en Japón, 78,9 % en Reino Unido o del 71,0 % en Alemania, los tramos de edad de 15-24 y de 55-64 son precisamente los que presentan tasas significantemente bajas en relación con la Unión Europea a 25.

El hecho de que la tasa de actividad sea baja se explica por la existencia de un salario mínimo alto (lo que mantiene fuera del mercado laboral a trabajadores poco productivos, como los jóvenes, aunque garantiza condiciones laborales dignas), una enseñanza universitaria en muchos casos poco acorde con el mundo laboral y en el caso de trabajadores más ancianos, incentivos para la prejubilación.

En cuanto al nivel de vida de los franceses, un dato significativo es que la brecha entre ricos y pobres se ha profundizado en Francia durante el periodo de 2004 a 2007.

Según un estudio del INSEE (Institut National de la Statistique et des Études Économiques), «la población en general se ha vuelto más pobre en comparación con quienes perciben ingresos muy elevados, que han visto incrementos medios mucho más fuertes».

Comercio

Los grandes conflictos bélicos europeos y mundiales entre 1870 y 1945 enfrentaron a Francia y Alemania, sin embargo, ambos países han construido desde los años 1950 un entramado de relaciones: institutos de investigación y universidades comunes, un intenso intercambio juvenil, más de 2000 ciudades hermanadas e innumerables contactos personales.

Esta situación puso el fundamento de la integración política de Europa, son recíprocamente su principal socio comercial y juntos constituyen el motor económico de la Unión Europea (UE).

En 2005 con un 10,2 %, volvió a ser el principal destino de las exportaciones alemanas y el origen del 8,7 % de las importaciones.

En 2006 más del 14 % de las exportaciones francesas tuvieron como destino a Alemania y cerca del 17 % del total de las importaciones francesas provino de Alemania.

Otros socios importantes en 2006 fueron: Bélgica, Italia, Reino Unido y España.

Agricultura

Es el principal productor agrícola de la Unión europea, aproximadamente un tercio de toda la tierra agrícola.

El norte de Francia está caracterizado por granjas de trigo grandes.

Los productos lácteos, la carne de cerdo y la producción de manzana se encuentran sobre todo en la región occidental.

La producción de ternera está localizada principalmente en la zona central, mientras la producción de frutas, verduras, y el vino se extiende del centro hacia el sur.

Es un gran productor agrícola y actualmente amplía su silvicultura e industrias de piscifactoría.

La puesta en práctica de la Política agrícola común de la Unión Europea y el Acuerdo General sobre tarifas y comercio, GATT han causado reformas del sector agrícola de la economía.

Es un líder de producción mundial agrícola y el sexto más grande.

También es el segundo mayor exportador, después de los Estados Unidos.

Sin embargo, el destino del 70 % de sus exportaciones son otros miembros de la Unión Europea y muchos países pobres africanos (incluyendo sus antiguas colonias) que afrontan una escasez seria de alimentos.

Las exportaciones estadounidenses agrícolas a Francia, son aproximadamente de 600 millones de dólares cada año y consisten principalmente en soja, productos de alimentación y forrajes y mariscos.

A los Estados Unidos exportan principalmente el queso, productos procesados y vino.

Asciende a más de 950 millones de dólares al año.

Turismo

El turismo es una fuente primordial de la economía francesa.

Es el país con más visitantes del mundo, aproximadamente 80 millones al año; sus turistas provienen principalmente de América del Norte, Japón, China, y otros países de Europa.

París es la principal atracción, pero también recibe muchos visitantes la Costa Azul.

Francia es un país con múltiples puntos de interés turístico: aparte de poseer uno de los mayores patrimonios histórico y artístico del mundo, es de los pocos países que puede ofrecer actividades de playa, montaña y campo.

También posee Francia diversos parques temáticos.

Los más famosos son:

Francia en el contexto internacional

La trayectoria histórica de Francia, así como la construcción de su sólido modelo económico tras la Segunda Guerra Mundial, le han proporcionado un estatus político muy relevante en la mayor parte de las organizaciones internacionales.

De hecho, al margen de indicadores macroeconómicos como el PIB o la renta per cápita, Francia destaca en indicadores sociales como el porcentaje de carreteras pavimentadas o el ratio de usuarios de Internet, cuyo incremento en los últimos años (372,8 % desde el año 2000) ha sido superior al de algunos países adyacentes.

Según el Banco Mundial, Francia tiene un 53 % de terreno dedicado a la agricultura, y es uno de los países que más han reducido las emisiones de CO2 per cápita en las últimas décadas, para lo cual se ha apoyado en parte en la proliferación de Centrales de Energía Nuclear.

Según datos de CIA World Facebook, la esperanza de vida media de los franceses es de 80,98 años y de ellos 64 años son con buena salud (noveno país en el ranking europeo, según Eurostat).

El número de camas en hospitales, un indicador importante para medir el ámbito global sanitario, es de 718,3 unidades por cada 100 000 habitantes (el único país europeo de gran tamaño que lo supera es Alemania).

Además, según el Foro Económico Mundial, Francia es el decimoquinto país del mundo en el Índice de Competitividad Global.

En la siguiente tabla se puede analizar el contexto socioeconómico de Francia a partir de datos del Banco Mundial, Eurostat y el Foro Económico Mundial:

Infraestructura

La red de ferrocarril es de 29 640 kilómetros (cifra de 2008), siendo la segunda más extensa de Europa Occidental tras Alemania.

Es operada por la empresa estatal SNCF (Sociedad Nacional de los Ferrocarriles Franceses) que posee trenes de alta velocidad como el Thalys, el Eurostar y el TGV que alcanza los 320 kilómetros por hora.

Los trenes Eurostar conectan Francia a través del Eurotúnel con el Reino Unido.

También tiene conexiones ferroviarias con sus demás países vecinos de Europa, excepto con Andorra.

Además hay metro en varias ciudades del país como París, Lille, Lyon, Marsella, Rennes y Toulouse.

Hay aproximadamente un millón de kilómetros de calzada útil en el país.

La región de París posee la red más densa de carreteras, que la unen con prácticamente todas las partes del país y con Bélgica, España, Mónaco, Suiza, Alemania e Italia.

No hay ningún precio por impuestos en las carreteras, sin embargo, el uso de la autopista tiene peaje excepto en los alrededores de las grandes aglomeraciones.

Las marcas francesas dominan el mercado de los automóviles en el país, como Renault (el 27 % de coches vendidos en Francia en 2003), Peugeot (el 20,1 %) y Citroën (el 13,5 %).

Más del 74 % de los coches nuevos vendidos en 2007 tenían motor diésel.

Hay aproximadamente 478 aeropuertos, incluyendo campos de aterrizaje.

El Aeropuerto de París-Charles de Gaulle, localizado en los alrededores de París, es el aeropuerto más grande y con más actividad del país, manejando la mayoría del tráfico civil y comercial, y conectando París con prácticamente todas las grandes ciudades del mundo.

Air France es la l��nea aérea nacional, aunque numerosas compañías aéreas privadas proporcionan viajes domésticos e internacionales.

Hay diez puertos principales, el más grande de los cuales es el de Marsella.

14 932 kilómetros de vías fluviales atraviesan Francia incluyendo el Canal del Mediodía que conecta el mar Mediterráneo con el océano Atlántico por el río Garona.

Demografía

Posee 65 447 374 habitantes (enero de 2010), de los cuales 62 793 432 habitan en la Francia metropolitana, con una densidad de 115 hab/km², y 2 653 942 habitan en la Francia ultramarina, incluyendo a la comunidad de unos 2000 científicos e investigadores destacados en la Antártida.

Alrededor del 75 % de franceses vive en núcleos urbanos.

París y su área metropolitana correspondiente a la Región conocida como « Isla de Francia » concentra 11 769 433 de habitantes, lo que la convierte en una de las más grandes del mundo, y la más poblada de la Unión Europea.

Otras áreas metropolitanas de más de un millón de habitantes son Lyon y Marsella que superan el millón y medio de habitantes cada una.

La esperanza de vida al nacer es de 84,5 años para las mujeres y de 77,8 años para los varones (2009).

Generalmente los varones tienden a obtener empleos a tiempo completo y las mujeres a tiempo parcial.

En Francia las vacaciones pagadas legales suman cinco semanas en cada año laboral.

Es considerado como uno de los países con mayor calidad de vida ya que la población disfruta de un alto grado de servicios, aparte de la sanidad que es una de las mejores del mundo.

La población está compuesta por descendientes de varios grupos étnicos, principalmente de origen celta (pero también ligure e ibero), fundamentalmente galos fusionados con la población precedente, que dieron nombre a la región de la Galia, hoy Francia (que incluía también Bélgica, Luxemburgo y Suiza).

Cronológicamente se fueron sumando otros grupos étnicos: en el proceso histórico formativo de la Francia actual son también significativas las poblaciones de origen griego, romano, vasco, germano (principalmente franco pero también burgundio), vikingo (en Normandía) y en menor medida sarraceno.

Desde el siglo XIX, Francia es un país de inmigración.

Uno de cada cuatro habitantes es de origen extranjero (en 1999, 23 % de la población).

Entre los extranjeros que se van integrando, predominan los belgas, suizos, alemanes, italianos, españoles (la inmigración española comenzó en el siglo XIX), portugueses, polacos, armenios, griegos, magrebíes, subsaharianos, chinos (1 000 000 en 2007), indochinos (vietnamitas, 250 000 en 2008), turcos (500 000 en 2010 ) y gitanos (500 000 en 2005 ).

El mayor número de inmigrantes en los últimos años proviene del Magreb.

En total existen unos cuatro millones y medio de inmigrantes, de los cuales aproximadamente un millón y medio nació en tierra extranjera pero se ha naturalizado adquiriendo la nacionalidad francesa, en tanto que otros tres millones son aún extranjeros.

Según el Gobierno se calcula que en Francia hay entre 200 000 y 400 000 inmigrantes ilegales, aunque las ONG 's hablan de medio millón.

Los estudios de población francesa muestran su composición mayoritaria de ciudadanos de origen europeo, un 91,6 %, de los cuales son franceses 85,0 % y de otros países 6,6 %.

El 5,7 % de la población proviene de países africanos, 3,0 % de asiáticos y 0,6 % de americanos.

Según un estudio publicado en La France africaine (2000), el 13 % de la población francesa es de origen africano (Magreb y África negra).

Esta composición es el resultado de la evolución migratoria y de la presencia significativa de población nacida en Francia pero de padres extranjeros, generalmente inmigrantes que a través de los años fueron obteniendo la ciudadanía francesa.

La población de origen judío se estimaba en 550 000 personas a principios de los años 2000, aunque no existen datos estadísticos dado que la ley francesa prohíbe recoger datos censales sobre etnias o religiones.

Evolución demográfica

La situación privilegiada en Europa Occidental, en el centro de una de las regiones históricamente más pobladas del mundo, ha favorecido unas tasas elevadas de poblamiento y de expansión demográficas, siendo el tercer país más poblado de la tierra hasta el siglo XVIII.

Esta expansión experimentó una fuerte desaceleración en vísperas de la revolución industrial que se mantuvo hasta entrado el siglo XX, en paralelo con el incremento demográfico de las regiones limítrofes, especialmente hacia la centroeuropea, en el área de influencia de Alemania, y las Islas Británicas.

Por otra parte, y especialmente durante los siglos XVI a principios del XX, una parte de la población francesa se instaló en otras regiones del mundo, al abrigo de la expansión colonial, configurando la base de las características poblacionales y composición étnica de otros países, principalmente en el Quebec de Canadá, Haití y otras antiguas colonias africanas, asiáticas y de Oceanía.

En América, en los territorios de soberanía francesa de San Pedro y Miquelón; la Guayana Francesa, Martinica y Guadalupe, a la base poblacional proveniente de la metrópoli, se añadió la de origen africano que junto con la mestiza, se ha convertido en el grupo étnico mayoritario.

En Oceanía la emigración de franceses ha sido menor y centralizada en Nueva Caledonia y la Polinesia Francesa, mientras que en el norte de África, una parte de la instalada en el Magreb conformó tras su repatriación a mediados del siglo XX la comunidad conocida como de los “pieds-noirs”.

También existe una presencia significativa de población de origen francés en otros países no directamente relacionados con sus colonias, principalmente de Hispanoamérica, como Argentina, Uruguay o Chile.

Tras la Segunda Guerra Mundial y el periodo demográfico conocido como Baby boom, el lento estancamiento de las tasas de crecimiento ha sido menos marcado en Francia que en otros países de su entorno, manteniendo un nivel de natalidad destacado en Europa gracias a las políticas sociales aplicadas para su estímulo.

Idioma

El idioma oficial es el francés, que según unos lingüistas del siglo XIX provendría del franciano, variante lingüística hablada en la Isla de Francia que a principios de la Edad Media y a lo largo de los siglos se ha impuesto al resto de lenguas y variantes lingüísticas que se hablan en otras parte del territorio; la otra tesis es que es un estándar configurado a partir de las distintas lenguas de oïl.

A menudo, esta imposición del francés ha sido fruto de decisiones políticas tomadas a lo largo de la historia, con el objetivo de crear un Estado uniformizado lingüísticamente.

De hecho, el artículo 2 de la Constitución francesa de 1958 dice textualmente que « La langue de la République est le français ».

Este artículo ha servido para no permitir el uso oficial en los ámbitos de uso cultos de las lenguas que se hablan en Francia, hasta que en 1999 el informe Cerquiglini estableciera 75 lenguas regionales y minoritarias habladas en Francia metropolitana y de Ultramar.

Desde 2006, 13 de ellas se enseñan como segunda lengua extranjera optativa en la escuela pública, como el bretón, el catalán, el corso, el occitano, el vasco, el alsaciano, el tahitiano y 4 lenguas melanesias.

La inmigración proveniente de fuera del país, así como de regiones exclusivamente francófonas, hace que el porcentaje de hablantes de estas lenguas sea cada vez más bajo.

Es uno de los estados que no han firmado la Carta europea de las lenguas minoritarias.

A pesar de todo, hoy en día, algunas instituciones privadas han procurado fomentar el uso de estas lenguas creando medios de comunicación, asociaciones culturales, escuelas primarias y secundarias para enseñar estas lenguas y emprender acciones reivindicativas a favor de una política lingüística alternativa.

Religión

La República Francesa oficialmente es un estado laico, secular y que tiene la libertad religiosa como un derecho constitucional.

Algunas organizaciones como la Cienciología, la Iglesia de la Unificación o la Familia o Familia Internacional (ex Niños de Dios) tienen el estatuto de asociaciones sin ánimo de lucro ya que no son reconocidas como religiones, y son consideradas «sectas» en numerosos estudios parlamentarios.

Según una encuesta de enero de 2007 hecha por las Noticias Católicas Mundiales, en su población están representadas las principales confesiones religiosas, pero el catolicismo está en receso: católicos 51 % (frente al 80 % de 15 años antes), ateos 31 % (frente al 23 % en la misma encuesta hecha 15 años antes), musulmana 6 %, protestante 2 %, judía 1,5 %, budista 1 %, ortodoxa 0,5 %, otras 1 %.

En otra encuesta realizada por IFOP y publicada en la revista católica La Vie, los católicos representan el 64 %, la proporción de ateos es igual al 27 %, el 3 % se identifica como musulmán, el 2,1 % se identifica como protestante y el 0,6 % se identifica como judío.

Según el más reciente eurobarómetro del año 2005, el 34 % de los ciudadanos franceses respondió que «ellos creen que hay un dios», mientras que el 27 % contestó que «ellos creen que hay algún tipo de espíritu o de fuerza» y el 33 % que «ellos no creen que haya ningún tipo de espíritu, dios, o fuerza».

Otro estudio da el 32 % de personas que se declara atea, y otro 32 % que se declara «escéptico sobre la existencia de Dios, pero no un ateo».

La comunidad de judíos en Francia se cuenta aproximadamente en 600 000 según el Congreso Mundial Judío y es el grupo más grande de esta religión en Europa.

Las estimaciones del número de musulmanes varían mucho.

Según el censo de 1999 había solo 3,7 millones de personas (el 6,3 % de la población total).

En 2003, el Ministerio de los Asuntos Interiores estimó el número total entre 5 y 6 millones (8 millones según el Frente Nacional).

Cultura de Francia

Ciencia, tecnología y educación

En Francia han nacido grandes inventores como los Hermanos Montgolfier (inventores del globo aerostático), Joseph-Nicéphore Niépce (químico, litógrafo y científico aficionado que inventó, junto a su hermano, un motor para barcos y, junto a Daguerre, la fotografía), Clément Ader (inventor del avión, un micrófono y los primeros perfeccionamientos del teléfono), los Hermanos Lumière (inventores del proyector cinematográfico), René Théophile Hyacinthe Laënnec (inventor del estetoscopio), Louis Pasteur (la técnica conocida como pasteurización) entre otros; cuyos aportes a la ciencia han sido decisivos en la historia de la humanidad.

En Francia la educación es gratuita en todos sus niveles, tanto para los estudiantes franceses como para los extranjeros.

En 2007 los gastos en educación alcanzaron el 28 % del presupuesto del Estado.

Literatura

Francia es el país con más Premios Nobel de Literatura (quince).

Tanto los ciudadanos franceses, como los francógrafos de otros países (como el belga Maurice Maeterlinck o el senegalés Léopold Sédar Senghor) componen lo que se denomina como literatura francófona, que ha influenciado la obra de importantes autores extranjeros, y la literatura de muchos países.

Tal es el caso del cubano Alejo Carpentier o del denominado boom latinoamericano.

También se puede mencionar al gran escritor Antoine de Saint-Exupéry, autor del libro El principito.

Bellas artes

Las primeras manifestaciones provienen del arte prehistórico, en estilo franco-cantábrico.

La época carolingia marca el nacimiento de una escuela de iluminadores que se prolongará a lo largo de toda la Edad Media, culminando en las ilustraciones del libro de Las muy ricas horas del duque de Berry.

Los pintores clásicos del siglo XVII francés son Poussin y Lorrain.

En el siglo XVIII predomina el rococó, con Watteau, Boucher y Fragonard.

A finales de siglo comienza el clasicismo de un Jacques-Louis David.

El romanticismo está dominado por las figuras de Géricault y Delacroix.

El paisaje realista de la Escuela de Barbizon tiene su continuación en artistas de un realismo más testimonial sobre la realidad social de su tiempo, como Millet y Courbet.

A finales del siglo XIX París, convertida en centro de la pintura, ve nacer el impresionismo, precedido por la obra de Édouard Manet.

A éstos siguen Toulouse-Lautrec, Gauguin y Cézanne.

Ya en el siglo XX, surgen los fauvistas en torno a Matisse y el cubismo de la mano de Georges Braque y el español Picasso que trabaja en París.

Otros movimientos artísticos se van sucediendo en el París de entreguerras, decayendo como centro pictórico mundial después de la Segunda Guerra Mundial.

En Francia la escultura ha evolucionado desde la antigüedad por diversos estilos, sobresaliendo en todos ellos: prehistórico, romano, cristiano, románico, gótico, renacentista, barroco y rococó, neoclásico (Frédéric Auguste Bartholdi: Estatua de la Libertad), romántico (Auguste Rodin: El pensador), y los contemporáneos.

Arquitectura

En lo que se refiere a la arquitectura, los celtas dejaron su huella también en la erección de grandes monolitos o megalitos, y la presencia griega desde el siglo VI a. C.

se recuerda hoy en la herencia clásica de Massalia (Marsella).

El estilo romano tiene ejemplos en la Maison Carrée, templo romano edificado entre 138-161 a. C., o en el Pont du Gard construido entre los años 40 y 60 d. C., en Nimes y declarado patrimonio universal en 1985.

En Francia se inventó el estilo gótico, plasmado en catedrales como las de Reims, Chartres, Amiens, Notre Dame o Estrasburgo.

El renacimiento surgido en Italia, tiene su estilo arquitectónico representado magistralmente en el Castillo de Chambord o en el Palacio de Fontainebleau entre otros.

El arte barroco (también de origen italiano), y el rococó (invención francesa) tienen obras extraordinarias en Francia.

Tal es el caso del Palacio del Louvre y el Panteón de París entre tantos otros.

El modernismo o arte moderno en arquitectura abarca todo el siglo XIX y la mitad del XX, y en él Gustave Eiffel revolucionó la teoría y práctica arquitectónica de su tiempo en la construcción de gigantescos puentes y en el empleo de materiales como el acero.

Su obra más famosa es la llamada Torre Eiffel.

Otro grande de la arquitectura universal es Le Corbusier, un innovador y funcionalista celebrado especialmente por sus aportes urbanísticos en las edificaciones de viviendas y conjuntos habitacionales.

Música

En la música francesa desde antes del año 1000 se destaca el canto gregoriano empleado en las liturgias.

En Francia se creó la polifonía.

En la denominada Ars Antiqua, se le atribuye a Carlomagno el Scholae Cantorum (783).

Los Juramentos de Estrasburgo es la obra lírica francesa más importante de la Edad Media, periodo en el que se desarrollan los Cantares de Gesta como el Cantar de Roldán.

Francia fue la cuna de los trovadores en el siglo XII, así como del Ars Nova dos siglos más tarde.

Durante el Romanticismo París se convierte en el centro musical del mundo y en la actualidad Francia mantiene un lugar privilegiado en la creación musical gracias a nuevas generaciones de compositores.

Dentro de los exponentes de la música popular francesa de la segunda mitad del siglo XX, se encuentran figuras como Edith Piaf, Dalida, Charles Aznavour, Gilbert Bécaud, Georges Brassens, Serge Gainsbourg, Jean-Michel Jarre o Barbara.

Gastronomía

Caracterizada por su variedad, fruto de una diversidad regional, tanto cultural como de materias primas, así como también por su refinamiento, la cocina francesa está considerada como referente mundial.

Su influencia se deja sentir principalmente en las cocinas del mundo occidental que han ido incorporando a sus bases conocimientos técnicos franceses.

El renombre internacional de sus principales chefs, como Taillevent, La Varenne, Carême, Escoffier, Ducasse o Bocuse contribuyó a la difusión de la alta cocina por los restauradores franceses desde finales del siglo XIII.

El art de la table o arte de la mesa, desarrolla una serie de recomendaciones sobre cómo presentar la mesa, servir los platos y degustarlos.

La célebre guía roja Michelin (Guide rouge Michelin) establece una clasificación de los mejores restaurantes mundiales mediante una jerarquización por número de estrellas, el máximo de ellas reservado a unos pocos considerados de calidad suprema.

Con el apoyo de las autoridades y el beneplácito del presidente de la República Nicolas Sarkozy, un grupo de chefs y gastrónomos abogan por que la cocina francesa sea incluida por la Unesco en la lista del Patrimonio de la Humanidad.

Tradicionalmente, cada región posee su propia cocina, caracterizada por los productos

Si en algo destaca la gastronomía francesa, aparte de por sus panes, sus quesos y su bollería, es por sus vinos y licores de todo tipo, desde el burdeos hasta los espumosos de la región de Champaña-Ardenas.

Son, además, típicos franceses y de producción nacional la absenta, el armañac, el calvados, el chartreuse, el Cointreau, el coñac y el pastis.

Deporte

A lo largo de su historia, Francia ha tenido grandes deportistas que han puesto en alto la bandera tricolor francesa.

Entre ellos cabe destacar al campeón de Fórmula 1, Alain Prost, a Romain Grosjean, a la tenista Mary Pierce, a los tenistas Gael Monfils y Richard Gasquets, a los baloncetistas de la NBA, Tony Parker, Joakim Noah y [[Boris Diaw.

La mejor participación de Francia en los Juegos Olímpicos fue en 1900, año en que la cita se realizó en París, ciudad que volvió a acoger el certamen en 1924.

En este evento, la delegación gala nunca ha bajado de los 10 primeros lugares siendo una de las mayores potencias mundiales a nivel olímpico y por qué no, a nivel deportivo.

Los deportes individuales están bien implantados en Francia.

Así por ejemplo el Tour de Francia, celebrado anualmente en el mes de julio desde 1903, es la competición ciclística más prestigiosa del calendario profesional.

El Torneo Roland Garros en París es uno de los torneos más cosmopolitas del Grand Slam.

En lo referente a las artes marciales, Francia también destaca entre uno de los mejores de Europa.

Pues la que más domina hasta el día de hoy es el karate, el judo y el savate (box francés), este último uno de los más difundidos en el mundo principalmente en los torneos del Knock Out.

En Judo destaca como uno de los más importantes en la historia del mundo, el francés David Douillet con diversas participaciones y premiaciones a lo largo de su trayectoria en este deporte.

En cuanto a los deportes de equipo, la selección de fútbol de Francia es uno de los combinados nacionales más importantes a nivel mundial.

Obtuvo el campeonato mundial de 1998 y en el 2006 obtuvo el subcampeonato gracias a la generación dorada liderada por Thierry Henry y Zinedine Zidane.

Este mismo conjunto obtuvo la Eurocopa 2000 y las Copas Confederaciones de 2001 y 2003.

La liga nacional, conocida como la Ligue 1 es una de las mejores a nivel europeo.

Destacan clubes como el Olympique de Marsella, único club ganador de la prestigiosa Liga de Campeones, así como el Olympique de Lyon, club ganador de siete títulos de liga de forma ininterrumpida en los inicios del siglo XXI.

Otros equipos importantes son el París Saint-Germain, el AS Monaco, el Girondins de Burdeos, entre otros.

Por su parte la Selección de rugby de Francia es una de las mejores del mundo.

Es la actual subcampeona de la Copa Mundial y la que cuenta con más títulos, junto con Inglaterra.

El Balonmano es uno de los deportes más seguidos, teniendo a la Selección de balonmano de Francia como un gran protagonista a nivel internacional.

Dentro de su palmarés se cuenta el título en la Copa de Europa 2010, los campeonatos del Mundo de 2009 y 2011, y la medalla de oro de los Olímpicos de Beijing 2008, siendo la primera selección de balonmano en conseguir estos tres títulos, los más importantes del mundo en este deporte, de manera consecutiva.

También la Selección de baloncesto de Francia es igualmente uno de los mejores combinados nacionales más importantes a nivel mundial.

Obtuvo el quinto puesto en el Campeonato mundial de baloncesto de 2006.

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Comentarios:

2015-08-17 Quina sort teniu els tortosins, de poder gaidur-ne al mateix lloc dels tres nivells de la restauracif3, amb l'ambient adient de cadascun d'ells i els plats que els caracteritza; la taverna, el menjador me9s els tastets. Per delirar-ne !.
2015-08-09 Criss from Romania, October 19, 2012 at 9:51 PM We spent a week at the end of September beginning of October. Is an ecellexnt place to base out around the lake especially if the weather is bad, we visited by car: Verona, Sirmione,...

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