Salvia es el género más numeroso de la familia de las lamiáceas, con 700 a 900 especies de arbustos, herbáceas perennes y anuales Comúnmente también se denominan salvia, aunque generalmente este nombre se asocia más a la especie Salvia officinalis, conocida popularmente por su uso en gastronomía, como planta ornamental y medicinal.
Este género se distribuye extensamente tanto por el viejo como por el Nuevo Mundo, con tres regiones de biodiversidad diferenciadas: América Central y Sudamérica (aprox.500 especies), Asia Central y la cuenca del Mediterráneo (250 especies) y Asia Oriental (90 especies).
Las especies de Salvia incluyen hierbas anuales, bienales y perennes, así como subarbustos leñosos.Los tallos son típicamente angulares, característicos de la familia Lamiaceae, con hojas enteras, aunque también pueden ser dentadas o pinnadas.Los tallos florales producen pequeñas brácteas diferentes a las hojas basales — en algunas especies estas brácteas son muy llamativas.
Las inflorescencias nacen en racimos o panículas que producen flores de color azul o rojo, el blanco y amarillo es menos común.El cáliz es tubular o acampanado sin garganta barbada y está dividido en dos labios; el superior entero o tridentado y el inferior hendido.La corola suele tener forma de garra y es bilabiada; el labelo superior normalmente entero o tridentado y el inferior bilobulado.Los estambres se reducen a dos estructuras cortas con anteras bicelulares; la superior fértil y la inferior imperfecta.Los estilos son bi-hendidos.El fruto es una suave núcula de forma ovoide u oblonga que, en muchas especies, está cubierta por una capa muculaginosa.
Muchas de las especie tienen tricomas (pelillos) sobre la superficie de las hojas, tallos y flores, lo que evita la pérdida hídrica.A veces estos pelillos son glandulares y al frotarlos algunas de las células se rompen liberando los aceites volátiles responsables de producir el peculiar aroma de estas plantas.Este olor a menudo resulta desagradable para el ganado y algunos insectos.
El término Salvia proviene de la palabra latina “salvare”, que significa “curar”, en referencia a las propiedades curativas de la hierba.El primer autor conocido en describir una planta llamada salvia por los romanos fue Plinio el Viejo, refiriéndose probablemente a la especie tipo del género Salvia officinalis.
La salvia tiene usos ornamentales, medicinales y gastronómicos, empleándose como condimento.También es habitual en España tomarla en infusión.